Escritor del MesNoticias

HUYO MI SER. COMO UNA ODIADA SOMBRA

Huyo mi ser. Como una odiada sombra,

huyo mi ardiente corazón vencido:

huyo mi soledad, mi rostro herido,

huyo mi voz rebelde que te nombra.

Tienden aún su clara, dulce alfombra,

el musgo gris y el césped florecido.

Pero en mí está la muerte, la he sentido,

la contemplo venir, y no me asombra.

Huyo mi ser. Ene esta loca huida,

quiero apagar tu grito, tu mirada:

mas, surge aún la llama estremecida:

a firme guerra y duelo me provoca,

hasta que al fin, llorosa, fatigada,

dejo tu beso arder sobre mi boca.

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