Escritor del MesNoticias

Extractado de «El árbol y otras hojas». Editorial Zig-Zag. 1966

El silencio

Voy a poner en orden mis papeles

antes de que mi frente se haga trizas

y el silencio deshoje sus claveles

en un pálido sitio de cenizas.

Y en el carro dorado de las mieses

transiten a lo lejos los veranos,

y la espiga desgrane nuevos meses

y pinten acuarelas nuevas manos.

Ay perdido en el tiempo y el espacio

dormir bajo la tierra, silencioso,

con el sueño de luces del topacio.

Y para siempre el orden… y la yedra

velando con sus hojas el reposo,

el estrellado idioma de la piedra.

«El árbol y otras hojas». Página 119

Un ramo de violetas

Sé de mundos lejanos, de planetas

habitados por seres o por cosas

en los que magos de la luz, poetas,

construyen las auroras y las rosas.

Donde hay lunas calladas y secretas

que esperan como naves misteriosas

y mares de aparentes aguas quietas

invistiendo de azul las nebulosas.

No en el tiempo la guerra de los mundos

no ese clavel de fuego en el vacío

no los dioses despiertos e iracundos,

sino mi pan, mis cantos y mi lecho,

El jardín con los besos del rocío

Y un ramo de violetas en tu pecho.

«El árbol y otras hojas», Página 59

El Pozo

Ay, hermano, como tú yo anduve

por la más ancha latitud del mundo,

toqué en la piedra el agua de la nube,

toqué las manos del amor profundo.

Una pequeña lámpara sin nombre

me alejó de las sombras del camino

y pude ver y andar hasta ser hombre,

hasta llegar a pozo cristalino.

Para unos fui canto sumergido,

raíz sombría, soledad secreta,

para otros un pájaro perdido.

Pero si todo sigue y ya no vuelve

yo no quiero el pozo de agua quieta

que recibe la luz y la devuelve.

Los íntimos metales, 1963

El árbol y otras hojas. 1967

La vieja casa

Cerca del ancho Maule está la casa,

el hogar solariego del pasado.

De su antiguo esplendor quedó esta brasa

que aún mantiene su fuego enamorado.

Como el mar tiene el viento que lo abraza

y le cubre de espumas el costado,

aquí el amor iluminó sin tasa

un solar de magnolias coronado.

La luna aquí vagó por corredores,

un tibio sol erró por l papayo

dejándole amarillos resplandores.

Una vida nació desde otra vida

y en la heredad besada por el rayo

sigue cantando el tiempo, sin medida.

Los íntimos metales, 1963

El árbol y otras hojas. 1967

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